Un día das, doy, un paso, y luego otro, y luego otro, y al caminar, pasito a pasito, despacio, tranquilo, vas, voy, de aquí para allá, de allá para acá, y cada lugar, cada nuevo encuentro, cada nueva situación, te habla, me habla, y desde lo más profundo de tu alma, de mi alma, comprendes, comprendo, cómo funciona el engranaje que hace que mis movimientos, que tus movimientos, sean como son y que ocurra el milagro de encontrarnos.